Actividades
Taller Cirpack - Creatividad en acción
06 Noviembre 2014
Una nueva jornada de trabajo desarrolló el Círculo de Innovación de Packaging - CIRPACK - , en alianza con iCubo de la Universidad del Desarrollo.
Con una nutrida concurrencia, representantes de las empresas en alianza; se animaron a participar en un dinámico taller sobre el desarrollo del proceso creativo para la innovación.
El relator de iCubo, Felipe González, esta vez puso énfasis en los aspectos más prácticos del proceso, pero de igual forma, aprovechó la instancia para refrescar algunos conceptos que permitieran a los alumnos llegar a establecer soluciones concretas al final del taller.
Felipe explicó a la audiencia que, hoy por hoy, la innovación exige de los “creativos” comprometer el todo, vale decir, incorporar al proceso todas sus experiencias. Ya que es muy valioso y positivo, traer a la mesa los gustos, las aficiones y las pasiones de los participantes.
Usando la metáfora T shaped people, fue posible comprender de qué forma las habilidades blandas, además del expertise, vienen a cerrar el círculo de la innovación.
“A lo largo de los años se ha valorado el valor de la creatividad, porque se entiende su importancia para el crecimiento económico”- señaló González. A diferencia de países desarrollados como USA, donde el 52% de los ciudadanos se declara creativo, en Chile la creatividad aún no tiene prioridad como materia de aprendizaje.
En un mundo donde cada vez se habla menos de “segmentos” y sí de “usuarios específicos”, el profesor recordó el aprendizaje del taller 1, repasando las etapas del design thinking: Empatizar, definir, idear, prototipar y testear.
Esta fue la ruta para que los estudiantes avanzaran en su proceso creativo.
Una de las recomendaciones más importantes entregadas fue la innovación sin un propósito claro; no funciona. Sólo la creatividad combinada con la ejecución permite un resultado exitoso.
Felipe González, compartió las interesantes experiencias de Rhein, Lego, Kodak; además de la notable “mosca” de los orinales del Amsterdam Schiphol’s airport.
Sumergidos en el proceso
Luego de una energizante dinámica grupal, los alumnos pudieron romper el hielo, muy motivados para iniciar el trabajo en grupo.
Felipe se manifestó satisfecho, porque la mayoría cumplió con una tarea asignada que serviría para darle continuidad al taller.
Esta vez el desafío era: Diseñar ¿cuál será el próximo packaging de nuestros clientes?
Para ello, los asistentes debieron transitar por las etapas de:
1.-Definir el problema
2.-Brainstorming
3.-Construir prototipos
4.-Testear prototipos
5.- Presentar propuestas
Se organizaron los participantes del taller en 3 grupos los que funcionaron muy organizados y con gran disposición.
“La mayoría de las veces les cuesta agarrar el ritmo y aplicar las herramientas, pero ellos estaban muy motivados todos trabajaron, dieron sus ideas y prototiparon con mucho entusiasmo”- asegura González.
Para el relator lo más destacable de esta experiencia con los alumnos fue “que pudieron desarrollar ideas nuevas, más disruptivas y con un enfoque real en el usuario y/o cliente. También aprendieron que la innovación es abierta y no cerrada y que el potencial de trabajo en equipos multidisciplinarios es mayor que el de personas solas pensando”.
Otro aspecto a destacar para este diseñador, “es que las personas dejaron de lado sus intereses personales o de una organización en particular, para armar equipos más amplios e ir en búsqueda de soluciones en conjunto. La colaboración entre empresas fue tremenda” – concluye el experto.
Fuente: CENEM